Témpera sobre cartón, 30x21, 2015
En los últimos cinco años, cada vez que he ido al cine ha sido para ver películas infantiles acompañando a mi Violeta. Hoy he vuelto a ver una película de adultos con mi pareja más de 5 años después y le sensación ha sido rarísima, pues antes de ser padres íbamos casi todas las semanas y mi cinefilia había quedado reducida a lo que veía por la tele. Hoy he visto la última de Amenábar, aprovechando un cumpleaños de una amiguita de Violeta, y esta imagen sirve de ilustración a mi regreso a una sala de Cine.
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